Conozca sobre Tumores Cerebrales

por Dr. Luis Javier Flores Río de la Loza, Hermosillo, Sonora.
Neurólogo Re-Certificado · Neurofisiólogo Clínico
DGP 2423452 UAM Xoch. · Ced. Esp. 3873257 UNAM · SSA 10/04 
Tel. (662) 208-3024 y 217-4657

Es indiscutible que un tumor cerebral es una de las situaciones más temidas por la mayoría de las personas y, sin duda, una verdadera desgracia. No obstante esto, es mejor conocer, por lo menos a grandes rasgos, los diferentes signos y síntomas que pueden presentar los pacientes con tumores cerebrales, así como los tipos de tumores más comunes.

Para empezar, hay que tomar en cuenta que un tumor cerebral puede ser primario (surgir de células cerebrales) o bien secundario o metastásico (extensión hacia el cerebro de un tumor o cáncer en otro órgano del cuerpo). El factor común de los tumores cerebrales es la ocupación de espacio dentro del cráneo, desplazando estructuras cerebrales adyacentes y generando una respuesta inflamatoria alrededor del tumor, conocida como edema cerebral. Todo esto trae como consecuencia el incremento de la presión intracraneal, produciendo una diversidad de signos y síntomas.

Signos y síntomas
Los principales signos y síntomas que hacen sospechar la presencia de un tumor cerebral son los siguientes:
Dolor de cabeza: contrario a lo que puede llegar a pensarse, la cefalea generada por la presencia de un tumor en el cerebro no suele ser tan intensa como la migraña. En cualquier caso, el dolor de cabeza generado por un tumor tiene características especiales; por ejemplo, puede iniciar levemente, pero agravarse con el paso del tiempo, agravamiento que puede despertar al enfermo por el dolor cefálico o incrementar en intensidad durante los cambios de posición.

Náusea y vómito: las náuseas y el vómito se presentan cuando el tumor ya está causando una compresión importante de ciertas estructuras cerebrales o cuando su localización es en la fosa craneal posterior y compromete al tallo cerebral o al cerebelo.

Cambios de conducta, estados de ánimo y alteraciones cognitivas: no es raro que los tumores intracraneales causen depresiones, ansiedad, desinhibición, agresividad, alucinaciones, insomnio, afectación de la memoria, atención y concentración. Estas alteraciones pueden presentarse de manera insidiosa e, incluso, constituir un proceso demencial similar a la enfermedad de Alzheimer.

Signos de focalización neurológica: la focalización neurológica significa la presencia de un mal funcionamiento en un segmento corporal determinado, causado por la alteración de una vía motora o sensorial que a su vez es causada por el daño directo a un centro neuronal específico del cerebro. Los signos de focalización dependen del sitio cerebral en el cual se aloja el tumor. Entre los principales signos de focalización neurológica se encuentran la parálisis de una extremidad o de medio cuerpo, sensaciones anormales con esta misma distribución, alteraciones visuales cuando el tumor se asienta en la vía visual, alteraciones auditivas y del equilibrio cuando se afecta al nervio auditivo o al ángulo formado entre el cerebelo y una parte del tallo cerebral llamada puente, crisis convulsivas de inicio focal y alteraciones en la articulación y comprensión del lenguaje.

Presentación Stroke like: así se conoce a la presentación clínica de un tumor cuando semeja a la enfermedad vascular cerebral (EVC). Estas situaciones ocurren si el tumor cerebral se encuentra muy vascularizado y, por ende, sufre hemorragias de manera repentina, o bien, cuando el crecimiento del tumor es demasiado acelerado, comprimiendo estructuras cerebrales elocuentes que dan un cuadro clínico agudo o subagudo.

La historia clínica cuidadosa y una extensa exploración neurológica ayudan a sospechar el diagnóstico e incluso a ubicar la lesión en el encéfalo. Para confirmar la sospecha de un tumor cerebral, son de invaluable ayuda los estudios de neuroimagen, como es el caso de la tomografía axial computada (TAC), y la imagen por resonancia magnética (IRM) de cráneo. El electroencefalograma (EEG) puede en ocasiones hacer sospechar la presencia de una lesión de este tipo en el cerebro, pero cuando la lesión es eléctricamente silente, puede resultar completamente normal. M

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