
por LFT. Ana Leslie Romero Valdez, Fisioterapista
DGP 7952319 UVM · SSP-CEPRSS-2013-748
Usted ha salido exitosamente del cáncer. Ya ha recibido tratamiento de quimioterapia, radioterapia o alguna intervención quirúrgica, y su médico le comenta que debe tener precaución para no presentar Linfedema. También pudo haber sido diagnosticado desde el nacimiento o en la adultez, y tal vez sea la primera vez en su vida que ha escuchado esto. Cualquiera que sea el caso a usted le interesará saber más.
El sistema linfático tiene un rol importante en la función inmune de nuestro cuerpo y está vinculado con la circulación sanguínea. Está formado por vasos, ganglios linfáticos y la linfa, que es el fluido que transporta. Los ganglios linfáticos se encuentran alrededor de todo el cuerpo, pero los principales se localizan en el cuello, axilas y en la ingle; la conexión entre ellos forman el sistema linfático. La linfa es transportada a través de todo el sistema linfático conteniendo principalmente moléculas de gran tamaño: proteínas. Cuando los vasos linfáticos no son capaces de transportar el fluido linfático de regreso a la circulación, por que han sido removidos o hubo un daño en los vasos linfáticos, éste se acumula resultando en una inflamación crónica conocida como Linfedema.
Formas de linfedema
Linfedema Primario: es una malformación del sistema linfático desde el nacimiento. Se puede dar en cualquier etapa de vida y es más común en piernas.
Linfedema Secundario: es un daño directo al sistema linfático, ya sea por cirugías como mastectomía o extirpación de ganglios linfáticos.
Signos y síntomas
El linfedema puede aparecer pocos meses después de algún procedimiento quirúrgico, años después o nunca. Los lugares del cuerpo más comunes donde se presenta son brazos y piernas, pero también en mano, pie, tronco, cuello, cara, abdomen y genitales.
El primer signo es una inflamación en la extremidad con riesgo. Otros síntomas son: sensación de pesadez y opresión en la extremidad; la ropa que frecuentemente se pone aprieta más de algunas áreas del lado afectado; cansancio exagerado en el miembro, así como también hormigueo y calambres; disminución de la flexibilidad en la mano, muñeca, pie o tobillo; opresión anormal al traer anillos, reloj, pulseras.
Tratamiento ideal para el linfedema
Una vez que se haya confirmado la presencia del linfedema se llevan a cabo los 4 elementos que forman la Fisioterapia Descongestiva Completa.
1) Cuidado de la piel.- La piel está muy susceptible a infecciones y es necesario usar cremas con bajo pH, libre de alcohol y fragancias.
2) Drenaje Linfático Manual.- Se estimulan las paredes de los vasos linfáticos para acelerar el drenaje de la linfa hacia vasos linfáticos sanos y disminuir el volumen de la extremidad afectada. Es importante hacer hincapié a que no es un masaje convencional y debe ser aplicado por personal capacitado.
3) Terapia de Compresión.- En las primeras sesiones se hará el uso de vendajes.
4) Ejercicios terapéuticos.- Se hará un programa de ejercicios enfocados a cada paciente. Habrá una mejor respuesta en la descongestión si los músculos de la extremidad afectada se activan. Es recomendado practicar natación, caminar e incluso yoga.
Ya que haya sido lograda una descongestión de la extremidad, se pasa a la etapa de mantenimiento, donde se indicarán prendas de compresión especializada para lograr la realización de todo tipo de actividades, sin que haya riesgo de volver a presentar un edema igual al inicial.
Lo positivo de esta terapia es que es segura, no invasiva, y ha demostrado resultados positivos a largo plazo. Tratamientos tales como diuréticos o cirugías, no son apropiados para el linfedema. Al inicio los diuréticos ayudarán a disminuir el contenido de agua, pero el edema volverá a aparecer cuando el medicamento pierda su eficacia.
Consejos para vivir con linfedema
• Su dieta debe ser balanceada. Si presenta sobre peso será una carga más para el sistema linfático.
• Debe cuidar su extremidad al no tomar la presión en el brazo afectado, no permitir ningún piquete con aguja en su extremidad ya sea por inyección o toma de sangre.
• Debe protegerse de las exposiciones directas al sol (también camas de bronceado, baños sauna) y del calor extremo y local para evitar cualquier sobrecalentamiento del área o quemadura.
• En la casa y el jardín tomar precauciones para evitar cualquier lesión en la piel y evitar sobre esfuerzos.
• Las actividades deportivas son importantes y benéficas, pero deberá saber qué tipo de deporte puede practicar o sólo disminuir el nivel de intensidad.
• Deberá evitar el uso de anillos, reloj, pulseras y todo accesorio que comprima la extremidad, incluyendo tirantes del bra y ropa interior apretada.
El linfedema debe ser evitado llevando los cuidados necesarios desde el momento de salir de cirugía hasta que vuelva a retomar sus actividades diarias. Pero en el caso de presentar algún signo de linfedema debe acercarse a su médico para ser diagnosticado y tratado a tiempo por un fisioterapeuta especializado. El linfedema no debe ser un obstáculo en la vida social o laboral y no debe afectar su calidad de vida. MH
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